El día en que el Presidente quedó “bloqueado” en Europa (Una retrospectiva de uno de los hechos que marcó el 2013)


El presidente Evo Morales  aborda el FAB 001, tras 13 horas de estar en Viena. Foto: El Deber.
(Texto difundudo en el Anuario 2013 de Página Siete, que se publicó el domingo 15 de diciembre)


El lunes 1 de julio, el presidente Evo Morales admitió públicamente que estaba dispuesto a dar asilo a Edward Snowden, el exagente de inteligencia que tantos dolores de cabeza le generaba por aquellos días al Gobierno de Estados Unidos, al filtrar información sobre los programas de espionaje de la Casa Blanca.
Morales hizo esa declaración en una entrevista que concedió a la red RT de Moscú, Rusia, donde asistía a un encuentro de países productores de gas. Ni por asomo, aquel día, debieron pasar por la mente del Presidente las consecuencias que tendrían sus palabras, ni mucho menos las peripecias que debió sortear un día después, a bordo de la aeronave presidencial FAB 001.


Aproximadamente a las 17:00 del martes 2 de julio, el canciller David Choquehuanca informó al país que durante la madrugada el Mandatario boliviano había sido víctima de un “bloqueo aéreo” por parte de cuatro países: Francia, Portugal, España e Italia, cuyas autoridades y funcionarios de aeronáutica o bien negaron su permiso para que el FAB 001 sobrevuele por su territorio, o bien impidieron que aterrice a abastecerse de combustible, provocando un desvío obligado a Austria, donde Morales y su delegación permanecieron varados por más de 13 horas en el aeropuerto de Viena.
La repercusión mediática y por las redes sociales fue inmediata y de tal magnitud, que casi nadie recordó que el Presidente había viajado a Moscú para participar en el Foro de Países Exportadores de Gas, donde planteó el “acceso universal” de ese recurso como un elemento primordial para el desarrollo del ser humano, entre otras cosas.


Ni siquiera el debate sobre el posible asilo a Snowden resistió en la agenda mediática ante el “vendaval informativo” del “bloqueo aéreo”.
El rechazo a la actitud de los países europeos fue unánime, incluso en líderes opositores y disidentes del Ejecutivo, y en la mayoría de los gobiernos de los países latinoamericanos.


Lo inexplicable
Retornaba muy contento, porque un país como Rusia nos daba mucha importancia. Habrá inversiones de las empresas estatales de Rusia, como socios, en hidrocarburos... venía pensando… cuánto invertirán, cuándo se conocerán los resultados...”, contó Morales horas después al referirse a su amarga experiencia.


Los planes e ilusiones del Jefe de Estado se trocaron en incredulidad y preocupación, poco antes de que su avión ingrese a espacio aéreo francés. Los pilotos le informaron que les habían restringido el ingreso. Y tras consultas infructuosas en otros países vecinos, optaron por aterrizar de emergencia en la capital austriaca.
Según anunció Choquehuanca en la rueda de prensa, todo estaba en regla y nada justificaba la actitud de último momento de los cuatro países, que días antes habían dado su visto bueno al itinerario del FAB 001.

El canciller expresó su extrañeza, exigió a los Estados involucrados una explicación oficial y denunció ante la comunidad internacional la violación de derechos de tráfico aéreo y de las prerrogativas de Morales como jefe de Estado.

Ya entonces lanzó una hipótesis que, conforme pasaron las horas, fue ganado prevalencia: “posiblemente se deba a las declaraciones del presidente Morales de que en caso de que el señor Snowden solicite asilo, nosotros lo vamos a analizar

Infografía tomada de Página Siete.
Horas después, Choquehuanca y otras autoridades y funcionarios del Gobierno calificaron como una “soberana mentira” la versión de que la nave presidencial estaba trasladando de incógnito a Snowden, quien por entonces permanecía varado en el aeropuerto moscovita. Ello, no obstante, no acalló la ola de rumores y especulaciones, sobre todo en los medios internacionales.

Por la noche, funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en Bolivia sumaron otro elemento a la incertidumbre, al entregar en la Cancillería una solicitud de extradición de Snowden.
En tanto, Morales permanecía en una sala VIP del aeropuerto de Viena mientras su equipo y funcionarios austriacos buscaban una salida al embrollo, y diseñaban un nuevo plan de vuelo. El incidente duró más de 13 horas.

Ya en Bolivia, al día siguiente, el Mandatario contó que el embajador de España en Viena se acercó con dos personeros y quiso revisar el avión presidencial e incluso le pidió tomar “un cafecito” en la nave, ante la fuerte sospecha de que allí estuviera escondido Snowden. Por supuesto que Morales se negó.

El regreso
El 2 de julio de 2013, fue un día sui géneris en la historia reciente del país. Tras conocerse la noticia, a las 22:30 el vicepresidente Álvaro García Linera, junto al gabinete de ministros y ministras, además de las presidentas de las cámaras de Diputados y Senadores, se dirigió al país desde las gradas del Palacio de Gobierno.

Queremos decir a los bolivianos, al mundo entero, que el presidente Evo Morales hoy por hoy está secuestrado en Europa. Queremos decirles a los pueblos del mundo que el presidente Evo Morales ha sido secuestrado por el imperio y está retenido en Europa”, sostuvo.
Al final, luego de los trámites respectivos, la aeronave finalmente partió de Austria a las cuatro y 34 de la madrugada del 3 de julio, y llegó a La Paz a las 23:51. Morales fue recibido por una multitud de autoridades, legisladores, funcionarios públicos y simpatizantes que lo esperaron por horas en la fría pista del aeropuerto internacional de El Alto.

Tras su descenso del FAB 001, y después de recibir los honores correspondientes, el Mandatario, frente a un micrófono y con guirnaldas en el cuello sostuvo: “Algunos países de Europa tienen que liberarse del imperio norteamericano”.
Poco después de la una de la madrugada, el aeropuerto estaba casi desierto, pero aún muchos se preguntaban si Edward Snowden estaba o no en el avión presidencial… Fue sólo el fin del primer capítulo de un insólito incidente de la diplomacia internacional.

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Capítulo II: El después del "bloqueo"
 
Inmediatamente después de que se consumara el incidente aéreo que sufrió el presidente Evo Morales, a su regreso de Rusia, el Gobierno comenzó una intensa campaña en foros internacionales para lograr las explicaciones y disculpas de los países involucrados: Francia, Italia, España y Portugal.

Un día después de que el Jefe de Estado arribara al aeropuerto de El Alto, cuatro presidentes (Nicolás Maduro, de Venezuela; Rafael Correa, de Ecuador; Cristina Fernández, de Argentina, y José Mujica, de Uruguay) y representantes de otros Estados de la Unasur llegaron a Cochabamba para participar en una reunión cuyo principal objetivo fue solidarizarse con Morales y repudiar a los gobiernos de los países responsables de los incidentes.

No obstante, el Ejecutivo boliviano atribuyó lo sucedido a Estados Unidos. Durante una concentración con sectores sociales, Morales sostuvo que no podía entender que los países implicados "estén tan sometidos al Gobierno de EEUU". A esa actitud la calificó como una "vergüenza".

Ya en la reunión, los mandatarios emitieron una declaración que resume en esencia los textos que conseguiría luego el Ejecutivo en varias instancias internacionales: exigir a los gobiernos involucrados explicar las razones de lo sucedido y presentar disculpas públicas y oficiales.

En ese contexto, el 9 de julio la OEA emitió una resolución que se enmarca en esos dos puntos. Pero ahí no terminaría todo.

Los presidentes del Mercosur fueron más allá el 11 de julio, durante la XLV reunión ordinaria del consejo de ese organismo multilateral, cuando definieron, además de esas dos exigencias, presentar una nota de protesta a los Estados involucrados y convocar en consulta a los embajadores acreditados en esos países "para que informen sobre los hechos ocurridos".

Finalmente, el 24 de julio, Morales aceptó las disculpas, "aunque no plenamente satisfechos, pero aceptamos las disculpas de los cuatro países como un primer paso, porque queremos continuar relaciones de respeto".

> Las palabras de los presidentes
"Lo que ha pasado con el hermano Evo, ha pasado con toda Bolivia, con toda Latinoamérica digna". Rafael Correa (Ecuador)

"Sentimos indignación de ver cómo un hermano estaba siendo agraviado, hasta el límite de su vida". Nicolás Maduro

(Venezuela)

"Nuestra solidaridad con el pueblo de Bolivia, con Evo y con toda Latinoamérica". Cristina Fernández (Argentina)
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EL PERSONAJE DEL HECHO

David Choquehuanca, canciller del Estado y gestor del "vivir bien"
 


 "Te estarás preparando, ¿no?", le previno el presidente electo, Evo Morales, a David Choquehuanca,
a fines de 2005, en pleno proceso de transición entre el gobierno de Eduardo Rodríguez Veltzé y el que asumiría él como primer mandatario indígena boliviano, el 22 de enero de 2006.

Mucho antes de esta advertencia, en un viaje que hicieron juntos a Libia, Morales le había insinuado que, de llegar a la Presidencia, lo nombraría canciller, algo que Choquehuanca -uno de sus más cercanos y fieles asesores- no buscaba ni quería.

Aunque en cierto momento Choquehuanca perdió terreno entre los hombres fuertes del MAS y el Gobierno, e incluso más de una vez se especuló con su salida del Ministerio de Relaciones Exteriores, poco a poco recobró su rol original y para mediados de este año, cuando Morales sufrió un insólito "bloqueo aéreo" en Europa, el canciller, como era de esperar, tuvo un papel determinante en las gestiones que el Gobierno hizo del caso.Y esas gestiones, a todas luces, fueron exitosas pues no sólo lograron las disculpas y explicaciones de los gobiernos de Francia, Italia, España y Portugal, sino que refrescaron e impulsaron la imagen de Evo, tanto interna como externamente.

El 2 de julio, tras la conferencia de prensa en la que informó del incidente, Choquehuanca tomó control total del caso: lideró las gestiones ante los Estados involucrados, administró la estrategia comunicacional del caso: las declaraciones de las autoridades y los comunicados oficiales; se contactó con mandatarios de países amigos y, ante todo, ideó el posicionamiento de la noción de que el Presidente no fue víctima de un percance fortuito, sino de un "atentado".

El 7 de julio, Choquehuanca se congratuló que de que la imagen de Morales haya salido reforzada, e hizo una declaración que pinta a carta cabal su incondicionalidad ante su jefe.

"Yo digo que el presidente Evo no sólo tiene suerte, sino que yo considero que es el señalado; él está generando el debate mundial", sostuvo en una entrevista para los medios estatales, y luego recordó cómo lo conoció en 1984, cuando Evo era un novato dirigente sindical.

"Le invitamos a un encuentro de jóvenes campesinos en La Paz, y desde ese momento ya sabíamos que él tenía algunas cosas, algunas energías que no teníamos muchos de nosotros".

Trayectoria

Pero volvamos al inicio, o mejor dicho, a 2005, cuando el nuevo Gobierno boliviano se armaba a contrarreloj. Choquehuanca se enfrentó a una disyuntiva: si no aceptaba el cargo de canciller, pensó "entrarán los mismos de siempre", y, según comentó años después, si al final aceptó fue porque no quería sentirse "culpable de que se siga manejando la diplomacia como en la era neoliberal".

David Choquehuanca nació el 7 de mayo de 1961 en la provincia Omasuyos de La Paz. Desde muy joven se inició en la dirigencia campesina y en los años 80 fue becado a Cuba para estudiar en la Escuela Nacional de Formación de Cuadros Niceto Pérez.

A su retorno trabajó en la campaña de los "500 años de resistencia", y en 1998 asumió el cargo de coordinador del Programa Nina, un espacio de formación y capacitación destinado al sector originario.

Ni indianista tradicional ni socialista marxista; cuando se le pregunta sobre su orientación ideológica, se define como un cultor de la "filosofía de la vida", cuyo principal paradigma es el Vivir Bien, un modelo de vida que va más allá del capitalismo y del socialismo.

Al respecto, en su artículo "La era del moqochinchi", Rafael Puente aseguró que Choquehuanca, más allá de su responsabilidad coyuntural como canciller, es por encima de todo "un filósofo aymara con ribetes de poeta".


Hoja de vida

Origen Nació el 7 de mayo de 1967 en la comunidad Cota Cota Baja, de la provincia Omasuyos de La Paz.

Estudios Salió bachiller del colegio General José Miguel Lanza y estudió en Cuba.

Trayectoria Trabajó como coordinador del Programa Nina, un espacio de formación y capacitación.
 


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